Mal dia para buscar

17 de septiembre de 2009

Los límites del periodismo

es una publicidad del gobierno de Dinamarca. En el video una chica con un bebe dice que hace el video para encontrar al padre de la criatura que era un extranjero que se tiró un buen da de borrachera. Cuentan las malas lenguas que es una campaña que han retirado financiada por "turismo de dinamarca" porque parece fomentar el: ´"ven a Dinamarca a tirarte (sin condon) a estas rubias estupendas." Si es así es de tirarse de los pelos porque los publicistas ya no saben que inventar. O quizá consiguen que se hable de ellos a base de traspasar limites.

También puede ser que esto es la misma teoría que tienen los adolescentes ingleses con la idea de que las islas Baleares estan contínuamente pobladas de españolas calientes con lengua bífida (lo mejor para la felación) y bares con una cantidad casi infinita de alcohol a bajo precio.

Dudley Moore, actor conocido por hacer "Arthur, el soltero de oro", hizo una película en el año 1990 titulada en España "Gente Loca" en la que actúa como un publicista que se vuelve loco y hace anuncios diciendo precisamente la verdad ("Volvo, son feos, sí. Pero son coches seguros").

La realidad que late detrás del exceso publicitario es el problema. Al final, por mucho que nos duela existe un turismo escondido que en algunos casos es vergonzoso (turismo sexual infantil) y en otros simplemente ruboriza.

Creo que fue Michael Houellebecq, ese escritor sobredimensionado sumergido en la polémica (y bastante brillante) el que planteaba en "Ampliación del campo de Batalla" una cadena de hoteles especializados en turismo sexual donde su principal diferencia respecto de otros prostíbulos es que su publicidad lo decía directamente: 1º planta, sobeteo. 2º planta, sexo oral. 3º, sexo explícito. 4º sadomaso. 5º sado con sangre. Ser honesto, afirma (más o menos) le exime de la hipocresía del engaño.

Quizá, mirado desde ese punto de vista, el único problema ético es la financiación del anuncio que no el mensaje. Al fin y al cabo es nítido, cristalino. (Y yo no sabía que las danesas fueran fáciles)

Pd: como internet es todo humor, os dejo las parodias que ya han hecho por ahi:

3 comentarios:

María dijo...

"Ven a Dinamarca a tirarte (sin condon) a estas rubias estupendas." Más o menos eso pensé yo cuando oí que era una campaña publicitaria.

Me parece simplemente absurdo...

Las parodias son buenísimas!

Buenas noches!

Demóstenes dijo...

Si se me permite la corrección, el libro de Houellebecq que mencionas es Plataforma.

pesimistas existenciales dijo...

correcion aceptada. Lo escribi sin contrastar.... la memoria me falla.