Incubus

Hace no demasiados años, cuando me dedicaba a gastar el tiempo rebuscando entre los discos de las grandes tiendas musicales esperando que mis dedos dieran con la sensación exacta para este o aquel estado anímico, había quedado con esa mujer con la que yo llegué demasiado pronto y ella siempre llega tarde.

Así que dejé pasar mis dedos entre los discos.

Tal y como era de esperar más allá de la hora concertada para vernos se sucedían los minutos y con esa extraña querencia que tengo hacia las verisones descubrí que incubus, esa banda de dificil estandarización que presentaba su cuarto disco, morning view, tenía como corte un "Wish you where here" que a mi siempre me recuerda cómo entra la segunda guitarra en la homónima canción de Pink Floyd.

Logré oir un par de veces la misma canción.

Después ella llegó, delgada y estirada, con el pelo hecho una coleta y algo de prisa fingida para no hacerme sentir culpable. Pensé "Wish you where here" y me anoté mentalmente la forma que le hacían los pantalones junto con la necesidad de retomar algunas canciones de este grupo.

Así que después de que volviera a dejarme solo o yo me volviera a quedar recogido buscando nuevas canciones con las que hacer una pequeña banda sonora según va pasando la vida me revisé la discografía de incubus un par de veces pensando, como dice alguna canción "sea lo que sea que traiga el mañana,ahí estaré. Con los brazos y los ojos abiertos"

Varias cosas me recuerdan desde entonces este grupo: la forma que tenía su (antes más que ahora) estupendo culo, las grandes tiendas de discos, las horas muertas, la manera en que aprendí a echar de menos a quienes me dejan por sueños de otras latitudes y la buena música.

Pd: en estos tiempos en los que el indie parece un grupo de castrados con voces asexuadas y lo más duro (en lo generalista) parece que son los 30 seconds to mars, seguir un consejo: revisar los orígenes. Siempre son mejores.