Mal dia para buscar

13 de diciembre de 2011

Urdangaringazo.

Decía Joaquin Sabina, cuando le dió el ictus, que no le había dado un ictus, sino un marichalazo. Al fin y al cabo a Marichalar, consorte de la infanta menos agraciada, le había pasado lo mismo y nadie sabe si aquella cojera o la inclinación sobre los fulares de cuadros fue el origen del "frascazo" de su matrimonio.

Lo que es cierto es que todos pensábamos que Marichalar era el cuñado menos correcto del príncipe, quizá por feo, quizá por esa manera casi de dandy por el lujo y los paseos por la milla de oro madrileña. Quizá por la altivez o quizá porque nos encanta pensar en los vicios de los poderosos y de los que llegaron a poderosos por amor o por cama.

Dos cosas han marcado la vida del príncipe: saber desde siempre que los reyes son los padres y que su cuñado era el hombre del saco.

El otro cuñado era el cuñado perfecto. Dicen que aunque estaba previamente comprometido con otra buena mujer la infanta, la guapa, le vio en pantalón corto en un partido de balonmano de Barcelona 92 y dijo un "pa mí" que duró un par de meses. Era un tipo alto, deportista, elegante, reservado. Lo sigue siendo. Además parece que es rico.

Mi abuela decía que ella votaba a la derecha por una cuestión económica: "si son ricos robaran menos"- afirmaba. Hasta cierto punto y utilizando exclusivamente el sentido común (es decir, sin considerar que hay una cosa llamada codicia) siempre le he dado la razón.

Cesar Alierta, presidente de telefónica, dió 100€ de propina a un limpiabotas hace unos días tras descubrir que habían compartido pupitre y que la vida les había llevado por diferentes senderos. La noticia absurda hubiera sido que el señor Alierta le hubiera robado el betún.

Cuando un tipo que ya es rico por derecho (moral o de pernada) se dedica a ir rapiñando unos cientos de miles de euros de aquí y se hace unas sociedades fantasmas por allá me deja dos opciones: la primera es que han usado su nombre y su buena fe para enriquecerse a su costa. La segunda es que es idiota. Desconozco el caso de Urdangarín.

Aún así, cada vez que un tipo con una esposa atractiva viole a una fea o cada vez que un rico se ponga en la puerta del banco Santander para robar la pensión a una vieja que salga con el dinero en el entreteto podremos decir que se ha cometido un supuesto Urdangaringazo.

Que es como un pelotazo, pero sin necesitarlo.

2 comentarios:

IPARRAJOSE dijo...

PUEDE SER QUE LE VENGA YA DESDE SU APELLIDO. DESCONOCIENDO SU ETIMOLOGÍA Y HACIENDO USO EXCLUSIVO DEL DICCIONARIO: URDANGA: CERDA/ ARINA : HUIDA (LA HUIDA DE LA CERDA)
QUE SÉ YO, IGUAL TIENE ALGO QUE VER

Anónimo dijo...

Debo disentir con su abuela, ya que hay ejemplos a porrón de ricos que quieren más y más y más (etc.). Esa misma afirmación la hacían los italianos respecto a su querido Mierdusconi y ya ve cómo ha "evolucionado" en sus años de Poder. Se ve muy claro en España que el Botín cada día es más grande (en todos los sentidos que se me ocurren).