Mal dia para buscar

28 de julio de 2012

Expectativas.

No eres preso de los sistemas ni de las cadenas. Ni siquiera eres preso de las circunstancias y las señales que te llevan por uno u otro camino. Al final de todo, si lo piensas bien, eres preso de tus expectativas.

Pd: supongo que con eso lo dejamos hasta agosto.

26 de julio de 2012

UNKLE Lonely Soul

God knows you're lonely souls God knows you're lonely souls God knows you're lonely souls Yeah, yeah I believe there's a time and a place To let your mind drift and get out of this place I believe there's a day and a place That we will go to, and I know you wanna share. There's no secret to living (there's no secret to living) Just keep on walking There's no secret to dying (there's no secret to dying) Just keep on flying. Im gonna die in a place that don't know my name Im gonna die in a space that don't hold my fame. God knows you're lonely souls God knows you're lonely souls. I believe there's a time when the cord of life Should be cut, my friends (cut the cord, my friend) I believe there's a time when the cord can be cut And this vision ends (let this vision end). But Im gonna die in a place that don't know my name And Im gonna cry in a space that don't hold my fame. Walking in the cold Just keep on flying Therell be a searchlight On the mountain high God knows you're lonely souls God knows you're lonely souls God knows you're lonely souls God knows you're lonely souls Yeah yeah yeah yeah yeah Im a lonely soul. Im gonna die in a place that don't know my name Im gonna die in a place that don't know my name. God knows you are lonely souls Lonely souls Lonely souls Lonely souls Im a lonely soul.

24 de julio de 2012

Toros en la Monumental.

Dicen, con el glamour que da dar las noticias y las exclusivas en la BBC, que Cataluña va a pedir el rescate lo mismo que lo hizo la españolísima Valencia y la nimia Murcia, pero por una cuestiñon de porcentaje en los informativos de Antena3.

Desconozco las condiciones que el gobierno del estado les va a imponer. No creo que sean como ese tipo de invasión alemana de Europa, a base de ganar en los trasteros de la soberanía o con la obligación de dar ventajas fiscales a las empresas germanas porque, en realidad, si un ahogado salva a otro ahogado lo más normal es que mueran los dos bajo el flotador (y entiéndase mal) de Angela.

Como en España somos así estoy convencido que Esperanza Aguirre pedirá rápidamente que se repongan los toros en la Monumental y que Isabel Pantoja no pague con cárcel sino con la obligación de cantar copla en las Ramblas para hacer de aquel lugar una nueva Marbella.

En realidad a más de uno se le habrá pasado por la cabeza.

Cuando Franco se llegó al poder y vió que galicia, Euskadi y Cataluña tenían la fea costumbre de ir por libre tomó una decisión estratégica: puso y potenció muchas empresas en dichas regiones sabiendo que millones de emigrantes de la España más profunda colonizarían culturalmente el campo del fútbol de San Mamés hasta lograr que el himno de Athletic se convirtiera en un pasodoble. Y no fué así porque un montón de años después los hijos de aquellos inmigrantes quemaban contenedores sintiéndose más vascos que el mismo Sabino Arana. De la misma forma hoy en día hay más Bolivianos besando el escudo del Barça que paseándose con la roja por el medio de la diagonal.

Ahora, gracias al ejemplo alemán y a ese regusto de sentirse más chulo que nadie hasta descubrir que en el saco de la caja ya no queda nada (aunque se insista que se ha regalado todo a la pobre España), a más de uno se le pasará por la cabeza acabar con el catalanismo a golpe de talonario.

Más de un extremeño, de un andaluz, de un burgalés... esperarán a ver cómo al grito de "dame argo payo" llegan esos snobs catalanes a la puerta del Banco de España y sentirán ese regusto absurdo que se tiene cuando ves tropezarse al contrario, aunque el contrario te lleve un par de vueltas de ventaja.
En españa somos así de estúpidos. Nos encanta ver sufrir al vecino y decir que no cuida la fachada del inmueble sin darnos cuenta que por su salón pasa una viga que si cede nos vamos todos al pavimento.

Alguno, más de uno y más de cien mil, habrán pensado lo de los toros por la misma razón por lo que cataluña se gastó un dineral en quitarlos: porque es algo muy español.

Y, mientras nos regodeamos en eso, cierra otra empresa. Ni siquiera es de toreros.

22 de julio de 2012

La mujer corporativa

Hay enfermedades de transmisión sexual que, básicamente, son portadas por el hombre y quienes las sufren son las mujeres. Una de ellas, quizá extendida y no catalogada como tal, es ese corporativismo tan radical que habita en el cerebro de alguna fashion victim poseída por lo cool.

Aparece sin mostrar muchos síntomas: se ha comprado un teléfono, uno de apple que son los que molan. Entonces descubre, como quien descubre el extraño entumedecimiendo del myolastán, que hay una cosa que se llama funda. Es una obviedad que aquel dispositivo y tecnológico hay que protegerlo. Así que compra una funda blanca, otra negra y otra multicolor, para que vaya a juego con la ropa de ese día o con con el bolso que corresponda. Se sienta en una terraza, se pide un café descafeinado solo de cafetera con hielos y pone el teléfono junto al paquete de tabaco. Tú, que no quieres ser menos, dejas el tuyo, desnudo como un niño recién nacido, junto a tus cosas.

-"Pero"- te dice como si hubieras profanado la tumba de su gato- "¿no tienes una funda?"

Entonces te intenta convencer que tener una funda es la quinta esencia de la verdad en el mundo de la telefonía. Te dice, como si fuera la única persona que lo supiera, que hay una aplicación que se llama whatsapp y que puedes mandar sms gratis a quien quieras. Te explica, cogiendo el móvil, sacándolo de la funda y pulsando torpemente la pantalla, cómo funciona sin que te de tiempo a decirle que, aparte de saberlo de antemano, no te importa. Pero, como eres un cabrón, le dices:

-"¿No tienen más aplicaciones los teléfonos con android?"
-"No"- te responde automáticamente y de forma categórica. "Ademas este tiene pantalla del tipo retina"

Así que dejas pasar el tiempo y vuelves a verla unos meses después. Entonces se sienta en la mesa, pone el tabaco, aparta el bolso y suena una melodía. "Disculpa"- te dice sonriendo. Y saca un teléfono con Android. Cuando termina de hablar le preguntas: "¿Y tu iPhone tan maravilloso?". "Ahora tengo este, que es mucho mejor". Y entonces decides no insistir.

Decides no insitir porque sabes que es de ese tipo: es una mujer corporativa. Hoy defiende a ultranza las bondades y maravillas de la gran empresa en la que trabaja porque se preocupa por el empleado y por la conciliación laboral mucho más que la competencia en la que estuvo antes. A aquella empresa que defendió de la misma forma que atacaba con cólera desbordada a todo aquel que no era del mismo equipo de fútbol del que ahora no se acuerda. Se hizo del de su novio, que es mucho mejor amante y persona que el último. Aquel era maravilloso hasta que se volvió un cabrón malvado aparcado en el olvido. Es la misma mujer corporativa que intenta que vayas al gimnasio porque va ella y porque es "lo que debes hacer" aunque ella había defendido durante años que andando un poco y con comida sana podía estar en forma. Es la misma que se escandaliza de que no te sepas el nombre de las protagonistas de Sex In the City o Mujeres desesperadas porque "es lo que debes ver". Es la misma que te pide aparcar un par de calles más allá para que no la vean salir de un coche de tercera mano y si la encuentras oyendo canciones de Rocío Jurado te jura que lo hace porque "es un clásico que deberías de escuchar".

Y, en definitiva, se empeña en que seas ella porque, probablemente, carece de criterio y defender sus decisiones, volátiles y caprichosas, es la forma que tiene de no sentirse perdida.

La tecnología, el deporte como mantenimiento, las series de televisión e incluso las fundas con forma de patuco que tienen los teléfonos estoy seguro que es algo que, por una cuestión de estadística laboral, las hemos creado y portado algunos hombres pero nunca nos dimos cuenta que son enfermedades que habitan en mujeres, si es que tienen desarrollado el gen del corporativismo. Y son de trasnmisión sexual porque se excitan cada vez que defienden sus posturas.

Facebook lo inventó un señorito, pero las que más granjas y amigos tienen siempre son mujeres. Las mismas que borrarán su perfil diciendo porque lo nuevo "es mucho mejor" sin darse cuenta que hace tres días defendían, sacando las uñas, lo contrario. "Deberías de borrarte"- te dirán como si no hacerlo te castigara a vivir en el infierno.

Pd: Hay mucho varón también que hace lo mismo, pero con los accesorios del coche.

20 de julio de 2012

El descuento hiperbólico

En lo referente al estudio sobre el comportamiento humano existe lo que se llama El Descuento Hiperbólico.

Más o menos viene a explicar esa manera tan extraña que tienen algunas personas de comportarse en lo que se refiere a los beneficios futuros contra los perjuicios (o no) próximos.

Eso explica, en una determinada medida, el motivo por el que alguien te puede jurar que va a dedicarse a comer sano y a hacer ejercicio en un futuro pero , después, cae rendida ante el primer croissant con chocolate que se encuentra en el camino. Dice la teoría, que en algunos casos se expresa como "una manera de explicar la estupidez humana", que nos hace aceptar la satisfacción de beneficios inmediatos en vez de mantener y apostar por beneficios futuros. El chocolate en el caso de haber apostado por una dieta sana es un buen ejemplo. Tirarte a una persona escultural o simplemente a la única que te hizo caso aquella tarde en vez de esperar a encontrar a alguien con quien te puedas sentir bien y puedas hablar a la par que vivir la conversación y el vicio podria ser su equivalente sexual. Comprar ahora y pagar en seis meses es su equivalente de El Corte Ingles porque minimizamos el problema futuro en compensación con su satisfacción inminente.

Básicamente explica con ejemplos los motivos por los que nos resulta imposible ponernos en un futuro a la hora de tomar decisiones sobre algo actual. Si nos ofrecen 20€ ya o 21€ mañana lo más seguro es que cojamos los 20€ pero si nos ofrecen 40€ dentro de un año o 42€ dentro de un año y una semana elegiremos los 42€. Explica lo concienciados que estamos por el medio ambiente pero lo incapaces que somos de reciclar hoy porque es más facil tirarlo todo a la misma bolsa.

Quizá, si lo analizamos con tranquilidad, es lo mismo que nos ha sucedido estos años en los que sabíamos lo que teníamos que hacer para no hipotecar nuestro futuro pero, en realidad, lo hicimos con cada una de las decisiones que fuimos tomando cada día.

Los que analizan el comportamiento humano consideran la posibilidad de que estemos diseñados para satisfacer las necesidades básicas de una manera mucho más determinante que aquellos objetivos nobles que nos marcamos para un futuro. Quizá por eso algunas proposiciones menos convenientes son más exitosas que lo que realmente juramos que queríamos obtener. Quizá por eso, porque no sabíamos que aquel crédito no lo podíamos pagar y nos gustaba mucho la casa, nos metimos en ese saco, nos compramos aquel coche o no fuimos capaces de esperar a ver si quien nosotros queríamos nos hacía caso en el mismo instante que la persona equivocada nos metía la mano dentro del pantalón, aunque fuera para robarnos la cartera.

Pero, ojo, que las teorías del arrepentimiento dicen que somos mucho más críticos con nuestros errores que con nuestros pequeños éxitos el día en el que descubrimos que no estábamos en el lugar o con la figura atlética que nos habíamos prometido tener.

Quizá ahora más de uno se castiga pensando que no supo hacer las cosas bien pero aquel crédito para irse de vacaciones era la manera de irse de vacaciones. Eso es descuento hiperbólico en estado puro.

19 de julio de 2012

Rajoy, el ectoplasta

Ayer me escapé a ver un concierto en las populares fiesta de Santurce, que es desde donde se va a Bilbao. Allí, como si fuera una apocaplisis indie, desglosaron más de uno de sus éxitos. Entre ellos y dentro del disco 1999 tienen una cancion dedicada al ectoplasta que es el tipo ese que sigue llamando a tu pareja mientras estás con ella.

Decidieron, tal y como hacen a lo largo de la gira, hacer como si el que empieza cantando es Mariano Rajoy que recibe una llamada de Rodrigo Rato. Pero, como todos hemos sido un ectoplasta alguna vez, Mariano es el ectoplasta de Angela (Merkel).

Y el video es este:
Pd: se recomienda, en honor a Andrea Fabra, oirlo hasta el final.
Pd2: gracias a los fans de LOL por colgarlo tan rápido. Yo lo vi desde la mesa, que es desde donde vemos los conciertos los viejunos porque un dia aprendimos que es donde se escucha mejor.

18 de julio de 2012

Andrés, Adriana, Tetas e Internet (+1)

Si recogiéramos firmas a través de Internet para pedir que Adriana Lima se la chupara a ellos y Andrés Velencoso realizara un desnudo frontal con rozamiento por cada casa de las que firmaran la propuesta es más que seguro que miles, millones de personas se movilizaran por ello.

Y eso, como es obvio, no quiere decir que esté bien hecho.

Internet tiene cosas estupendas pero existe una idea globalizada de que cuando hay un número de "me gusta" suficientemente alto entonces se presupone que la noticia es verdad. "Lo pone en Internet"- me decía una persona que juraba que si un disco duro se quema puedes volverlo a la vida dejándolo en el congelador 4 dias. "Si pones: "china con tres tetas" en google también te dice que existe"- le respondí. (Es más, salen 7millones de resultados (y 505mil fotos))

Existe un mundo paralelo en el que vive una parte de la sociedad que cree que Internet, por masivo y por democrático, siempre dice la verdad. La cadena Ser se regodea en Twitter de lo crítica que es la población con los recortes de Rajoy de la misma forma que la Cope comentaba el enorme número de firmas contra la bajada del sueldo de los funcionarios de Zp.

Lo que tiene internet para aquellos que disfrutan dando datos para certificar su verdad es que puedes encontrar razomanientos válidos para lo que quieres defender y puedes, igualmente, obviar los contrarios.

Internet miente, como una perra, como la guatemalteca que te dice que quiere en una discoteca de Salou mientras suena Pitbull, como los hinchas del equipo contrario cuando dicen que tu delantero se tiró al suelo, como aquella chica que te la decía que la tenías grande, como un sensor de polución estropeado o como la instalación de Windows cuando te promete que "ahora todo será mucho más divertido".

Las revoluciones en Internet no tuvieron éxito porque tú firmaras o compartieras un archivo, lo tuvieron cuando la gente salió a la calle e hizo cosas, porque ya nadie se acuerda de Assange aunque tuviera más firmas y posts que ninguno , aunque fuera un jodido trending topic como lo será Belén Esteban el día que la fotografíen mamándola por 20€ en las afueras de Parla.

Creemos, a veces, haber encontrado una manera de expresarnos libremente y podemos ver, a diario, a periodistas que hablan de una u otra movilización en Internet. Ayer se hablaba de hacer un día "Contra el Consumo" y se suponía que esa era un buena idea porque millones de personas estaban de acuerdo. Hoy se habla de lo feos que son los uniformes olímpicos del equipo español (que lo son) y se ponen de acuerdo en ello porque hay miles de memes haciendo mofa de ello de la misma forma que alguno se escandalizaría si Roberto Verino (con el que compartí una cena y me pareció un tipo estupendo) hubiera cobrado su tarifa habitual por ese diseño mientras gritan que es "un despilfarro más en un país en ruina que solo da de comer a los ricos"

Internet se ha convertido en el refugio de los protestones y de los psicóticos de la crítica sin que haya nada más allá de quejarse continuamente como si no hubiera más asuntos que el notición del día, el nuevo escándalo de corrupción o la nueva revolución de oriente. Esos posts, críticos, con los datos justos y sin más soluciones que las que puede dar un visionario sin derecho a voto, son los libros de autoayuda de la era cibernética, sobre todo si tienen menos de 140 caracteres.

Y porque haya más páginas o más retwits no quiere decir que sea verdad, ni siquiera con más comentarios o más links. Es más popular. Pero popular es Adriana Lima sexualmente activa, Andrés Velencoso imitando un ventilador con su pene y, por supuesto, las chinas con 3 tetas.

Que son mentira.

16 de julio de 2012

De la merluza al Pintxo.Pote

Mi padre, que durante una parte de su vida se dedicaba a viajar constantemente, tenía una costumbre particular a la hora de elegir restaurante: miraba el precio de la merluza.

En vez de hacer una comparativa rápida de los precios de cada uno de los productos del menú buscaba uno que estuviera en prácticamente todos los sitios y había memorizado el importe habitual de dicho plato. De esa forma si el precio de la merluza estaba alto él deducía que era un restaurante caro y si estaba bajo entonces era un buen momento para valorar otras variables del mismo como pudiera ser la ubicación o el resto del menu.

Los centros comerciales, que de estas cosas saben un poco, aprendieron hace años que nuestra manera de actuar se parecía a la de mi padre. Buscamos un producto y lo comparamos pero somos tan tontos de buscar el producto que está en la portada de las ofertas sin darnos cuenta que los cartuchos de las impresoras son mucho más caros en una gran superficie que en cualquier otro lugar. Por eso nunca están de oferta. De esa forma llegamos a la conclusión de que el comercio es barato o caro sin llegar a calcular nunca el valor de la compra media que hacemos en dicho lugar porque ese es un trabajo que está destinado solamente a los psicóticos del consumo.

Hasta hace un tiempo éramos conscientes que las diferencias de precios eran relevantes a la hora de decidir el lugar en el que comprar. Algunos siguen pensando lo mismo. Algunos piensan que las "tiendas de chinos" son baratas por definición hasta que hoy he descubierto que la tarjeta de memoria que yo vendo a 7€ está a 15€ en ese lugar abarrotado de material en el que nunca aciertan con la ortografía de las ofertas y que sigue abierto a las 11 de la noche, supongo que porque sigue siendo de día en Taipei.

Lo que ha pasado es que quienes tienen que poner los precios ya no saben hasta donde van a tener que bajar. Ya no sabe, el responsable del restaurante, a qué precio tiene que poner el plato de merluza para no perder dinero con cada pez que tenga que cocinar.

Si nos damos cuenta la mayoria de los productos que comprábamos hace años han bajado su precio, si es que ese producto no está dominado por una multinacional del petróleo o agarrado por los huevos de la recaudación estatal. La gasolina está cara, es cierto. Los transportes públicos, también. Teníamos miedo a la oscuridad y ahora miedo al recibo del agua, de la luz y del gas. Pero las camisetas están a 10€. Un Pintxo-Pote a 1,5€. Te puedes comprar un coche nuevo 4000€ más barato que hace tres años. Por 590€ he vendido dos ordenadores de configuración media (sistema operativo legal incluido) esta misma tarde.

Yo viví una època en la que salía, hace muchos años, con 5000 ptas a la calle. Después esos 30€ no llegaban para nada y ahora mismo puedo pasar unas cuantas horas con ese mismo dinero, si es que dejara de fumar algún día.

De alguna forma tengo la sensación que muchas cosas han reorganizado su precio al amparo de la crisis.

Algunos clientes siguen pensando que los comerciantes podemos ir más abajo en algunos precios, como si cagáramos millones y yo, al menos una vez al día, vivo en un intento de regateo contínuo por parte de la plebe que no es consciente que quienes más sabemos de cómo palpita la calle somos los que vivimos de ella y pagamos cada vez que abrimos una persiana. Y no podemos bajar más. Estamos más baratos que los chinos. El precio de la merluza está a Pintxo-Pote.

Una de las maneras que nos harán salir de la crisis es apoyarnos entre nosotros y el comercio de la esquina es el que contrata al hijo de tu vecino y el que paga los impuestos con los que asfaltan las calles, encienden las luces y abonan el salario al médico que te mete el dedo en el culo el día que te duele. Una parte de lo que te gastas en Ikea va un sueco rico y cabrón que vive en un pais que recoge dinero al 1% y se lo presta a España al 7%.

I don´t like (spanish) mondays

Porque todo esto es más o menos cierto. Sales un viernes del trabajo y cuando vuelves el lunes ya no tienes deducción por vivienda. Te sube el iva en general, el de la cultura (porque para qué hará falta) pasa del 8 al 21 como si fuera un lujo. Las funerarias lo mismo , supongo que para terminar con los cadáveres en la calle por falta de pago. Lees en algún lugar que si sales a buscarte la vida fuera perderás el paro, que dos de los más representativos periodistas de la televisión pública se van con una patada en el trasero y que al que se mueve un poco le dan con la porra de la policía porque es un delito quejarse o estar en la calle un poco aunque sea en verano. Todo eso desde el viernes al lunes. Tell me why I don´t like Mondays.

14 de julio de 2012

Live and let Live

Texto del 2003:

Morirse es algo que se suele hacer más de una vez a lo largo de la vida. Una es la definitiva, pero muchas otras son las previas, como un ensayo. Se muere la infancia y se muere la vida afectiva. Se muere en un grupo y se muere ante los ojos de algunos y se muere la vida social. Se muere a propósito, lo cual se puede considerar un suicidio social o se muere porque te matan. Lo que está claro es que hay más de una muerte a lo largo de la vida. Como en todas las muertes siempre se intuye un final, mayor o menormente dramático, pero se intuye. He llegado a la conclusión que antes de una muerte siempre se tiende a intentar hacerlo con la mayor honorabilidad posible. Hacer las paces, cerrar puertas sin dar portazo, en definitiva, lo que se dice “morirse tranquilo”.

13 de julio de 2012

Miedo de verdad y en condiciones

Hay una canción de Tempelton que se titula "Miedo de Verdad y en Condiciones"
Y aunque se refiere a todos esos miedos que sientes a seguir adelante o a quedarte solo en una relación más edulcorada que un referente pop, es, salvando las distancias, el mismo efecto que se siente cuando sabes que con esto es con lo que te quieres quedar pero no encuentras ninguna solución para que sea algo tan feliz como te contaron y te convencieron que iba a ser.

Nuestra educación es la principal culpable de nuestras miserias.

Hemos nacido rodeados de películas con final feliz y con plenitud absoluta. Hemos nacido, al menos las generaciones que van desde los 70 a finales de los 80, con el convencimiento absoluto que por el mero hecho de nacer nos merecemos un coche grande, una familia sonriente, un soporte tecnológico brillante y una defensa de nuestros derechos (que nos los enseñaron profesores que no los habían tenido) como si viniera de serie casi como el aire que debemos respirar.
Y, probablemente, toda esa millonada de personas se han dado de bruces contra la realidad que dice que no puede ser, que no es verdad, que se llama lujo porque lo tienen unos pocos y que se llama "sudar" porque es el esfuerzo a realizar. Así que nos sentamos en nuestro sofá y nos quejamos de la televisión que vemos, salimos a la calle y nos irritan las copas que nos sirven, nos enrabietamos porque los viajes no son largos y porque los orgasmos son cortos, porque las funerarias tienen un iva del 21% desde el mes que viene y porque los hijos que tendremos no podrán dormir en una cuna de diseño.

Nos da rabia que ella no tenga las piernas tan largas o tengo que soportar impasible sus quejas de no ser el mismo tipo que anuncia colonia saliendo del agua en medio de los anuncios mientras una parte de mi, que viene de mi más tierna infancia, me dice que si me esfuerzo lo suficiente podré convertirme en aquel.

Y no es cierto.

Hay tres manera de sobrellevar ese impacto con la realidad que supone descubrir que las cosas no son como te las contaban: 1- mentir, como el que miente en un bar al estilo anuncio de compresas para llevársela a la cama, 2- convertirte en un dibujo animado que resulta ser una caricatura de lo que se supone que debías ser o 3- aprender a disfrutar todas esas pequeñas cosas que tiene cada día que pasas.

Yo ya elegí. Los que no anunciamos colonia también tenemos un lado atractivo. Espero que alguna persona no espere que salga, a diario, mojado, en calzoncillos y seductor, cuando ella tenga un mal día porque no estaremos en ninguna playa paradisiaca, yo saldré de la ducha mojando el parquet y con las ojeras características de un autónomo castigado por el iva. 

Solo hay que perder el miedo de verdad y en condiciones que te palpita desde dentro y desde el día en el que te enseñaron una lección que, corazón, no es verdad. Vivir en un anuncio puede estar bien, pero es mentira. Lo bueno es que todo eso que no parece tan bueno, lo es.

11 de julio de 2012

Niemöller es de Lavapiés

Me dice un amigo al telefono que si mañana nos bajaran el sueldo a todos es más que probable que el 50% de los españoles se siguieran marchando de vacaciones.

Le respondo que la subida de iva es la otra forma de bajarnos el sueldo a todos. Me dice, sin parar a pensar en ello, que se va a marchar de vacaciones.

Hay personas que se escandalizan con lo que quieren y se olvidan de otras muchas cosas, lo cual repercute en la memoria de pez en la que a algunos les gusta vivir. En realidad que el dinero para sindicatos y partidos políticos se baje un 20% me parece una medida acertada, porque ni soy político ni sindicalista. Que se elimine un 30% el número de concejales me parece correcto cuando ves los plenos de algunos pueblecitos con más ediles que habitantes, pero no soy concejal. Que se eliminen los moscosos, que son esos días festivos que tienen los funcionarios por ser funcionarios, también me parece lógico aunque quitar una paga entera a los mismos empieza a parecerme algo más intenso, pero como no soy funcionario ni lo pienso. Quitar liberados sindicales es algo que se tenía que haber hecho hace años, por lo menos desde el punto de vista del comerciante que suele atender a más de uno que se jacta de estar tocándose los huevos a cargo del sindicato. (Que no digo que sean todos, pero más de uno se coge las horas sindicales los dias de partido). Eliminar las ayudas a la contratación, obviamente, es una manera muy rara de fomentar que se contrate a nadie y quitar la desgravación por la compra de vivienda es una manera muy poco favorable a que alguien se compre nada, aunque hace tiempo que solo pueden comprar los ricos pero nos desgravábamos muchos pobres que compramos hace años. De las pensiones y los parados, pues como que no, aunque si logro matar mi neurona solidaria como no soy pensionista y aún no estoy parado...

Esto se parece a la parábola de la loncha de jamón.
También al texto de  Bertolt Brecht Martin Niemöller, que adaptado dice así:
Primero fueron a por los inmigrantes, y no me preocupé. Luego fueron a por los funcionarios, pero como no era funcionario tampoco me preocupé. Más tarde fueron a por  los pensionistas y los parados, pero no era mi caso. Subieron el iva (dos veces) y ya era demasiado tarde.

En realidad lo que dice mi amigo tiene toda la razón. Lo único que parece importar a algunos, ahora que no hay futbol y las olimpiadas no han empezado, es a donde se marcharán de vacaciones. Y en ese caso da igual ser parado, trabajador o estar pagando el crédito personal con el que se fueron de vacaciones el año pasado.

Algunos habrán pasado el día indignado y se agarrarán a aquello de que todos somos mineros.

Pero cuando el salga el sol mañana y se hable de la operación salida ya verás como mineros serán los demás. Y el gobierno sabe que no hay solidarios en vacaciones

Bertolt Bretch Niemöller, hoy, hubiera nacido en Lavapiés.

10 de julio de 2012

Autofotos




Porque está demostrado que una mujer moderna es mucho más facil que salga a la calle sin bragas que sin móvil.

9 de julio de 2012

Anita, la cibertonta

Si escribes Anita Sarkeesian en google llegarás a su propia entrada en la Wikipedia donde te viene a decir que es una conocida feminista que defiende la imagen de la mujer en la cultura popular actual. Te dirá, más o menos, que tras haber denunciado publicamente que los videojuegos utilizan roles machistas para describir a las mujeres se ha disparado una campaña en internet contra ella que la hace sentirse ciberacosada.

Independientemente que en octubre del 2009 hicimos una entrada titulada "No hay feas en los Videojuegos" lo que es cierto es que a más de uno se le olvida que internet no es un periódico ni una televisión con censores o personas dedicadas a cuidar el estilo: internet es la calle. Así que Anita, Sara Carbonero, Ramoncín, Bisbal, la novia celosa, Salvador Raya o todos aquellos que han denunciado públicamente sentirse acosados en internet por la masa anónima (Troles) entran directamente en la categoría de Cibertontos. (No quiero hacer ningún comentario de Cañizares y la foto de su mujer desnuda publicada ante los 170.000 seguidores de twitter).

Internet es libre (más o menos), y eso es una chulada. De la misma manera que es libre también es cierto que cuando uno se muestra en internet corre el riesgo de que le caigan bofetadas por todos los lados. Si de pequeño te pegaban en el recreo y te ibas a quejar al profesor lo más normal es que te cayeran hostias todos los recreos hasta la graduación, por idiota.

Internet tiene, si nos limitamos a los comentarios y esa manera de fomentar (al estilo tumblr) la culturilla y chascarrillos populares, la capacidad de encontrarnos miles de frases que bien se podrían decir en el momento en el que te crees el más gracioso del bar porque te has tomado catorce cañas. (Porque está demostrado que borracho te crees más seductor y más gracioso)

"Cuando samos ricos, nos compremos un chalé" he oído hace un momento por la calle. Podría ser perfectamente uno de los millones de comentarios, al estilo forocoches, que van y vienen cada segundo por la red.

"Los políticos son unos gilipollas". "La selección es la hostia". "Oygan, alguien me puede dezir k´mo krakear la wii?". "Mi ninia presiosa". Tenemos que reconocer que cualquier cosa es posible y, por supuesto, que te ataquen y que te insulten tras un comentario anónimo es lo más probable cuando dices cosas, con razón o no, que pueden no gustarle a la mayoría o a la mayoría vociferante que cabalga por los comentarios de internet como si no tuvieran otra cosa que hacer con su vida justo un momento antes de bajarse otra película o hacerse una paja visitando Petardas.

Si estás en tu casa y deseas con furiosa cólera que te follen como si fueras un adolescente desatado no haces una propuesta formal a doble espacio evitando los términos menos obscenos, dices las cosas como las piensas, que para eso estás en casa. Para muchos, es más, para la mayoría, Internet es ese lugar donde dicen las cosas como les parece oportuno y les ha parecido oportuno hacer bromas de esta señorita así que dicen lo primero que se les ocurre y ahí queda, como un meme más.

Afortunadamente en Internet las modas pasan rápido. A mi también me han insultado alguna vez de la misma manera que me gané algún puñetazo en medio de algún recreo.

Pero cuando Anita denuncia que la acosan en internet no es porque sea una feminista bogando en contra del mundo sino porque se ha convertido en Cibertonta.

7 de julio de 2012

Futuros, naranjas, Barclays y tú.

Cuando me explicaron cómo funcionaba el mercado de futuros lo hicieron con naranjas. Me dijeron que podías ir donde un tipo que tiene un amigo que, a su vez, posee un campo de naranjas y decirle y jurarle que le vas a comprar las naranjas que cultive el año que viene a 1€ la naranja. Entonces buscabas a alguien que tuviera un barco y le contabas que ibas a tener unas naranjas dentro de un tiempo y que si las quería transportar para venderlas después. El tipo negociaba contigo y te prometía 1,5€ por naranja porque él se había buscado a otro, en otro continente, que le prometía 2€ por cada una. Así que ese señor del barco se iba a su banco y les decía que ya tenía 0.5€ (multiplicado por el número de naranjas) para pagar lo que le quedaba de barco y yo me iba al concesionario de coches y les pagaba con el 0.5€/naranja que se suponía que me daría el tipo del barco. Mientras tanto el dueño de las naranjas estaba tranquilo porque yo le daría el euro por naranja que le prometí, pero, eso sí, en ese futuro en el que existieran las naranjas.

Con esos datos es sencillo ver que antes de que existan las naranjas todos nos habíamos gastado el dinero y, en realidad, las naranjas te importaban poco porque lo único que querías era hacer dinero sin dinero porque, si lo lees bien, no te hace falta gastar nada porque el truco es no quedarse con las naranjas.

Más o menos eso mismo es lo que hemos ido haciendo durante todos estos años. Me da igual que sean naranjas, compras de pisos sobre plano o amigos en facebook. Hemos vivido en el futuro que nos estábamos creyendo. Más de uno vendimos un piso sobre plano antes de que lo terminaran.

El caso es que un día no hay naranjas, no han construido el piso o llamas a uno de tus amigos y no puede (o no quiere)  estar contigo... y se va todo al carajo, que es lo que sucede cuando enfrentas el mundo real y el mundo virtual.

Porque el problema es que nos habíamos creído que todo eso que era virtual también era verdad. Al fin y al cabo hay días que tienes una erección porque imaginaste algo que no tenía por qué suceder, supones que eres un tipo rico porque esperas poder vender el coche a un determinado precio o pones como garantía, casi como un futbolista de 12 años, los goles que meterás en el 2023. Todo son apuestas a futuros inciertos que ocultan la realidad del día en el que las hacemos. Cuando los tipos de interés suben o bajan es porque alguien apuesta.

Acaba de destaparse que Barclays se ponía de acuerdo con otros bancos para prestarse dinero a un tipo de interés pero en realidad lo hacían a otro. Decían: "me ha dejado 100 millones al 3%" y en realidad era el 2%, con lo que había ganado un 1% (que es un millón). Pero nunca se movía el dinero de la misma forma que nunca llegaron a producirse las naranjas. Sin embargo ese apunte contable lo pagabamos entre todos.

Ya verás que decepción se va a llevar alguno cuando descubra que no tiene 200 amigos y que en el supermercado las naranjas están (si es que están) a 5€. Las pagarás con un crédito al tipo de interés que haya marcado Barclays.

(Y con esto termina la lección de economía de hoy. Estoy salivando porque mi madre me prometió una comida rica. Si le pidiera a un colega que me pagara un café a cambio de comerse la comida de mi madre yo habría ganado un café. La diferencia es que mi madre no es una especuladora culinaria.)

5 de julio de 2012

Grandes éxitos: Enero-Junio 2012

Vamos con los post que recuerdo con cariño de lo que llevamos de año. (Si, es un Greatest Hits)


Y sí, aunque ha sido un semestre muy político (y económico) y algunos posts de esos que intentan contar que quizá también tenemos algo que decir y hacer para solucionar los problemas que nos caen como lluvia sin paraguas son aceptablemente buenos... paso de ellos.

En realidad lo importante es todo lo demás, hasta el complejo de payaso.

4 de julio de 2012

Circle Of Friends.

La canción es de Edie Brickell. Canta, cuando lo mejor que hace es tocar la guitarra, J. Mascis. Y aun así me quedé clavado en esta canción buscando cualquier otra cosa.

Me, I'm a part of your circle of friends /and we notice you don't come around /Me, I think it all depends / on you touching ground with us / But, I quit I give up /Nothing's good enough for anybody else /it seems / And I quit I give up / Nothing's good enough for anybody else / it seems

And being alone / is the best way to be / When I'm by myself it's / the best way to be / When I'm all alone it's / the best way to be /When I'm by myself / nobody else can say goodbye

Everything is temporary anyway / When the streets are wet -- / the color slip into the sky / But I don't know why that means you and I are /- that means you and / I quit -- I give up /Nothin's good enough for anybody else it seems /But I quit I give up /Nothing's good enough for anybody else it seems

And being alone / is the best way to be / When I'm by myself it's / the best way to be / When I'm all alone it's / the best way to be /When I'm by myself /nobody else can say

Me, I'm a part of your circle of friends / and we notice you don't come around

3 de julio de 2012

El siglo del científico

Los responsables de la publicidad de tabaco sabían perfectamente que un señor con bata blanca y un paquete de tabaco era una estrategia perfecta para vender más.
Y esa estrategia de venta que ataca directamente a la credibilidad científica se ha utilizado por bebidas alcohólicas, por partidos políticos, por tertulianos televisivos, por empresas automovilísticas e incluso por revistas de pesca que terminan despidiendo a alguno de los científicos que les quedan debido a la presión de determinadas marcas.

Que los estudios científicos son un fraude publicitariamente trabajado no es ninguna novedad aunque de vez en cuando es noticia que alguna de aquellas cosas que nos contaban como ciertas se las habían sacado del orto.

Cuando alguien, normalmente una institución o una empresa con suficiente dinero, necesita demostrar la bondad de sus productos lo que hacen es encargar un estudio científico lo suficientemente sesudo y extenso como para que parezca creible sin que la marca corporativa salga en un excesivo primer plano. Solo así se entienden los anuncios de tabaco de los 50 o todos esos conocimientos populares que dicen que la CocaCola es estupenda para la resaca o para quitar el óxido.

También las asociaciones que se nutren de la defensa de los derechos de la infancia se empeñan en decirte lo mal que lo pasan los niños de tu vecindario de la misma forma que las que hacen pozos en Africa sacan continuamente fotos de negritos famélicos. En definitiva si no hubiera un motivo por el que necesitar de tu apoyo económico se quedarían sin trabajo.

En informática me repiten continuamente que quizá soy yo el que mete los virus en los ordenadores de las personas y siempre les respondo que las columnas de su garaje no las mueve el tipo que hace las reparaciones de chapa.

Sin embargo sabemos que vivimos en el siglo del científico, del tipo con bata blanca, una calculadora con muchos botones saliendo del bolsillo y unos cuantos bolígrafos manchando el mismo. Sabemos que si aparece un buen señor diciendo que los ositos de gominola son malos porque a su nieto se le han caido los dientes no tendrá ninguna importancia porque aparecerán unos señores con gafas rodeados de probetas lanzando en Science un artículo diciendo que el azucar pegado a trozos de plástico hace a los niños más inteligentes.

Todo dependerá del precio que tenga la ética  del científico.

Y dado como está el asunto económico hay estudios que no parece que hayan salido muy caros.

Lo leí en una revista científica. Dicen que en el próximo Gran Hermano van a llevar a dos biólogos y a una psicóloga. Harán edredoning en bata blanca. Usarán rotuladores Edwing a modo de dildos. Serán líderes de audiencia y Mercedes Milá recalcará lo profundo del experimento sociológico del bodrio en cuestión.