Creo que cada uno tenemos nuestros gustos, nuestras preferencias. Conscientes o inconscientes.
Desde ese punto de vista cuando nos sentimos interesados por alguien, sentimental o sexualmente, repetimos un esquema de atracción que reside en nuestro cebrero (el superior o el inferior)
Así que mal que nos pese tenemos MUCHO en común con el resto de las personas que han pasado (y pasarán) por la vida de nuestras parejas aparte del intercambio mayor o menos de fluídos obvio.
Por eso mismo , cuidado al decir: "¿Pero tú salías con "eso"?"
2 comentarios:
interesante... sigo leyendo
Yo no quiero parecerme a eso con lo que salió!!! :(
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