Mal dia para buscar

19 de abril de 2010

El culito blanco o el vello corporal


"Las desmelenadas actrices de Hollywood". Así titula un artículo de hoy en el periódico, entre nubes de volcanes y corrupciones varias.

En realidad el artículo trata sobre determinadas actrices a las que yo nunca les vi un pelo (Julia "bocachancla" Roberts, Penélope "memolo" Cruz o Mo´nique) que parecen ser famosas por su falta de depilación en general. "Estilo europeo" lo llaman.

En realidad he de reconocer, como hombre, que el vello femenino es grato cuando está donde debe de estar y a ser posible en su cantidad adecuada. El resto lo considero, machistamente, un exceso.

También es cierto, y esto lo digo como un hombre que se preocupa en una pequeña medida sobre su aspecto personal, que cuando aparece el trasero del actor en la cama con la actriz en particular nunca, afirmo, nunca tiene un solo pelillo. Eso discrimina considerablemente a aquellos que podemos pasar perfectamente desapercibidos en el escaparate de una tienda de peluches.

Sin embargo he de afirmar, señoritas, que los hombres con pelo resultamos muy confortables las largas noches de invierno. He de afirmar, también y para decepción de mis amantes, que mantengo a raya la cantidad asumible y el resto (el exceso) pasa por la guillotina revolucionaria de mis cuchillas francesas.

Pero me niego a depilarme como un hombre de culito blanco. Me niego a ser uno de esos traseros borrachos que se hacen fotos en las puertas de los bares de moda de alguna isla mediterránea. Me niego, en realidad, a alterar mi propia identidad por una moda o para que el agua resbale sobre mi todas las mañanas mientras busco un nuevo y velludo brote.

Dicen que la pérdida de vello en el ser humano es un rasgo de evolución y yo no debí de evolucionar lo suficiente. También algunos afirman que los hombres con menos pelos resultan más atractivos a las mujeres y por ello la seleccion natural hace que su cantidad sea cada vez menor. Yo, al contrario, soy así: con vello, soltero y poco evolucionado. Nunca fui lo suficientemente adolescente o moderno para ir por ahí haciendo calvos (ver foto), pero doy calor por las noches y tengo los principios morales intactos de un hombre de los de antes. Quiero decir que desnudo prefiero ser yo. Sin ser una selva o un perrito de agua que cambia el pelo con mis señas de identidad me siento más cómodo que intentando seguir la depilada senda del hombre publicitario que nunca podría ser. El tiempo que se gasta depilarse lo gasto en leer.

Hace años decidí que dada la alarmante pérdida de mi atractivo físico habría que potenciar el atractivo intelectual. Y aquí estoy, envejeciendo con clase y cada dia más culto.

5 comentarios:

izsk dijo...

y yo que no entiendo esa manía depilatoria!. Estoy de acuerdo con mantener cuidado el jardín, pero de ahí a cambiarlo por gravilla. Es más limpio, dicen, sí, y mas soso
y a mí me gusta enredar los dedos en el pelo de un hombre cuando tengo intimidad con el.
y desconfio de los que las prefieren depiladas, que lo que diferencia a una niña de una mujer, es precisamente el vello.

Anónimo dijo...

En parte de acuerdo con izsk en que los hombres que las prefieren totalmente depiladas me parecen sospechosos... pero prefiero un hombre que no parezca chewbacca (no se si me entendeis) un poco de vello esta guay, jugueteas y demas :) pero si hay que bucear entre pelo para encontrar cosas que tocar... noooo!!! XD

Anónimo dijo...

A mi me pasaba como a izsk jaja, yo tambien desconfiaba de los que las prefieren con todo depilado. Pues menos mal que lo de no depilarse es una cstumbre europea, que miren en Mexico por que ayí la uniceja es algo masivo.

Anónimo dijo...

También es cierto, y esto lo digo como una mujer que se preocupa en una pequeña medida sobre su aspecto personal, que cuando aparece la actriz nunca, afirmo, nunca tiene un solo pelillo. Eso discrimina a todas las mujers, aún si no pueden pasar desapercibidas en el escaparate de una tienda de peluches.

Anónimo dijo...

Me ha encantado tu frase final "Hace años decidí que dada la alarmante pérdida de mi atractivo físico habría que potenciar el atractivo intelectual. Y aquí estoy, envejeciendo con clase y cada dia más culto.", pero te has olvidado incluir entre parentesis "(y soltero)"

Eso si, ¡con mucha clase! jejejeje.


Que le vamos a hacer, aquellos que nos dedicamos a cultivar nuestro intelecto jamas estaremos de moda. Pero soy feliz asi.

En cuanto a los pelos, tanto en ellos como en ellas, el justo, a aquellos que les gusta rasurado, debe ser que no recuerdan muy bien como rasca y raspa al dia siguiente cual lija del 7.