Totus blogging tuus

La noticia que ha saltado, quizá para sorpresa de algunos, es que el Papa Benedicto XVI ordena a su equipo de evangelizadores del mundo (también llamados vulgarmente curas) a bloggear. De esa manera presupone que serán capaces de encauzar a ciertas almas descarriadas que circulan sin fe por el mundo virtual donde obviamente, aparte de ingentes cantidades de pornografía, hay un único Dios.

Resulta absolutamente paradójico que la iglesia haga este esfuerzo ímprobo para adaptarse a las nuevas tecnologías y a los nuevos aires de modernidad del mundo y no sea capaz de admitir que el sida mata, que los homosexuales no tienen ácido en vez de sangre, que algunas mujeres no pueden aurrinar su vida teniendo un hijo con 17 años, que el preservativo nos hace más libres y que incluso otros dioses son posibles.

Será que, tal y como dice la real academia de la legua, ímprobo también significa, en su primera apreciación, malvado.

Sin embargo considero personalmente que la Iglesia católica (como la inmensa cantidad de ONG´s más o menos organizadas) se compone, mayormente, de buenas personas. Creo, por quizá una herencia de mi educación en manos de religiosos de buen corazón, que de la misma manera que la mayoría de los políticos son honestos y no roban los dineros de nuestros impuestos la mayoría de los curas no se incorporan a la disciplina de la Iglesia para intentar abusar sexualmente de un monaguillo.

Sin embargo considero que de la misma manera los altos gobernantes viven de espaldas a la realidad o en las realidades sostenibles que ellos mismos se inventan, los jerifaltes eclesiásticos se encuentran tremendamente cómodos en sus realidades paralelas.

El único problema es que a partir de ahora habrá que estar atento no sea que tu messenger te diga "Benedicto acaba de iniciar sesión" y quiera iniciar una videoconferencia contigo justamente cuando acabas de salir de la ducha.