Mal dia para buscar

23 de noviembre de 2011

Gaga INC (y la muerte de las guitarras)


En el año 2004, en South Park, publicaron un capítulo titulado "Puta, estúpida y malcriada" donde Paris Hilton inauguraba una tienda con todos sus accesorios para que las buenas niñas del pueblo pudieran ser tan putas, tan estúpidas y tan malcriadas como ella misma, ya que en eso reside el componente mágico de su éxito. Independientemente de la carga moral que tiene que llevar consigo el final del capítulo (donde terminan admitiendo que ser un zorrón no lleva muy lejos) hay que reconocer que aquello fue un ejemplo digno de Nostradamus porque ayer Lady Gaga ha inaugurado su propio centro comercial donde se pueden adquirir todos los complementos necesarios para convertirse en una mamarracha estrella del pop.

Probablemente cuando Elvis empezo a mover sus caderas y a ser censurado de cintura hacia abajo la inmensa mayoría de las personas, que estaban hechas a esos grupos vocales de niños bien peinados que eran las versiones edulcoradas de los Righteous Brothers (Mocedades en España) más de un orgulloso padre de familia estadounidense tuviera la misma sensación que puedo tener yo hacia esos fenómenos de masas, excesivos arreglos electrónicos y puestas en escena coreográficamente perfectas al estilo de pequeños circos disfrazados de musical.

Claro está que en mi particionada estructura mental en un sitio está el circo, en otro la danza y en otro la música. Cuando voy a un concierto me suelo disponer a ver a personas con instrumentos musicales en la mano, cuando voy a un circo me dispongo a ver malabaristas y payasos, cuando voy a la frutería espero ver a un frutero y cuando quiero ver putas me voy a lupanares (o mancebías).

¿Estoy insultando a alguien? En absoluto. Elvis era un cantante glorioso y una gran revolución en el mundo de la música como lo fué Jimmy, como lo fue Janis, Nirvana, Prince, U2, Pink Floid, Michael Jackson, Bowie y todos aquellos que consiguieron hacer algo que nadie había hecho hasta entonces (en lo musical). He de reconocer que el producto que nos venden en la actualidad, basado en las estrellas pop de los 80, mantenido (a muy buen nivel) por Madonna y refrendado por sus prolíficas vástagas (Spears, Rihanna, Beyonce o Gaga) es capaz de producir beneficios industriales con la excusa de lo musical y la estrategia del marketing orientada hacia un consumo fácil y rápido de melodías insulsas que se repiten en las radiofórmulas más que los éxitos de KissFm.

Y aunque Elvis tiene su propio parque temático (de la misma forma que lo tendrá Michael y de la misma manera que los Beatles son una máquina de hacer dinero) cuando una joven adolescente quiere parecerse a su estrella favorita ya no hace falta que aprenda a cantar o que incluso se preocupe de tocar la guitarra, el laud o la bandurria. Ahora puede irse a un centro comercial y convertirse en una especie de Puta, Estúpida y Malcriada con unos grammy debajo del brazo, casi los mismos que tendrán los Dj dentro de unos años (que en las fiestas de los 80 eran los que ponían música porque nadie quería bailar con ellos).

Mientras tanto los músicos de verdad malviven en pequeños locales donde tocan a cambio de una comisión de las copas que te tomas. Algunos se soprenden cuando, de casualidad, acaban en un concierto de los Black Crowes y descubren que sin fuegos artificiales se puede llegar a lugares de éxtasis insospechado. Algunos se soprenden al conocer a Maceo Parker. Algunos, incluso, se soprenden al descubrir que lo que suena por los altavoces puede salir de una guitarra (o un bajo de 6 cuerdas) y no de una mesa de mezclas conectada a un lúgubre mp3.

Porque ya no escuchas guitarras en los éxitos que suenan por la radio y eso, si miro a la discografía que puebla paredes de mi habitación, duele.

("While my guitar gently weeps", a partir del minuto 3:27, con Prince haciendo de Dios:)

Pd: si no conoceis el capítulo, no perdérselo. (ojo con los popups, que es de megavideo)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ejem, escribo poco y voy a ir de listo para una vez que escribo pero es que el ejemplo que pones no es de una guitarra sino de un bajo de 6 cuerdas.
Aparte de eso, te sigo en silencio, muy buen blog!

pesimistas existenciales dijo...

Tieneusted razón. En mi parte dare el dato que ahi había un link a una actuación de pearl jam con "alive" pero estoy soseras y viejuno

Antony Vidale dijo...

ejem, seguramente tienes razon.
Pero intenta comprenderlo. Simplemente.
Gracias por la musica. Y no te creo viejuno. Y menos soseras.