Mal dia para buscar

20 de noviembre de 2010

A mis 30 y diez

...39 parece que aparento.
En este preciso instante en el que se publica este post estoy absolutamente deprimido en la fiesta del 40 cumpleaños de un compañero de exactamente la misma edad que yo. (Unos meses menos, pero eso no importa).

Lo cierto es que estaré rodeado de los universos paralelos que se van generando con el paso de los años. Ahí estará mi buen amigo, el mismo con el que hace muchos años terminé intentado arreglar el mundo después de consumir una buena botella de viña Ardanza por la playa de Laredo caminando en sinusoides. Estará su amante esposa, que es la responsable de la fiesta sorpresa, y supongo que alguno de sus dos amorosos hijos. Estarán, y esto son elucubraciones, compañeros de trabajo con traje y corbata de esos que disimulan sus entradas del pelo contando cómo compraron alguna entrada para ver a los Rolling. Estará algún divorciado con una jovencita de carnes apretadas intentando vivir una segunda juventud. Estará alguna buena mujer sentada con un gin tonic, que dicen que es la bebida de las separadas porque es tremendamente amarga. En algún lugar de la fiesta alguien nos hablará sobre el concienciamiento global y terminaremos hablando de política o de informática con la sobriedad que dan los años de experiencia. Otros se volverán a casa pronto porque tienen a los niños con los abuelos y yo aún no se si me disfrazaré de adolescente contínuo con unos pantalones que parecen de cuero y el pelo un poco despeinado.

Y todos tendremos envidia de todos porque más o menos por esta edad empiezas a pensar si el camino que tomaste era el correcto o si los caminos correctos eran todos los demás.

Me deprimiré de la misma forma que los viejos se van dando cuenta que sus amigos se mueren pero no por el paso del tiempo porque me siento orgulloso de la persona en la que me convertí sino porque tengo un miedo pavoroso a que el dia que a mi me toque la varita de los 40 vuelva a coger mi coche y conduzca solito oyendo canciones de antes por las calurosas calles de agosto sin que nadie haya encontrado el hueco que yo haya dejado donde hacerme una fiesta sopresa...
...sintiéndome tan joven y tan viejo.

Pd humorística a base de un corto sevillano: Eso es asín.

3 comentarios:

pesimistas existenciales dijo...

reconozco que no fue tan grave y me dejé llevar por el componente negativo y literario del evento.-

Anónimo dijo...

Pues no vayas a ese tipo de fiestas, los 40 son como los 30 o como los 20. Perdoname la expresion, pero el papel del water sigue siendo igual de necesario.

Anónimo dijo...

A ti te entra depresion porque vas camino de los 40 y no sabes si alguien te va a preparar una fiesta sorpresa. A mi me parece muy egoista por tu parte esa reaccion que si bien es personal y cada uno se toma sus cosas como le da la real gana, no piensas a la hora de escribir en si alguien en su dia quiso formar una familia contigo o con alguien como tu, mujeres como ella no tienen mas que resignarse porque la vida es asi y deben abandonar un sueño que a la mujer solamente se le permite durante un determinado tiempo y los hombres podeis seguir soñando con lo mismo, os podeis permitir el buscaros una chica 10 años mas joven y cumplir ese sueño o espectativa de vida, no se, me parece egoista por parte de un hombre que le entre una depresion temporal por ese motivo.
Esto lo escribo al aire con la esperanza de que no todo el mundo sea igual, como alguien que conozco que no le fue bien y ha sido padre ahora por primera vez a los 45 años, y queriendo dar lecciones, como mi marido le pregunto el otro dia si era consciente de que cuando el tuviese 20 años el iba a tener 66 años y no le iba a poder seguir el juego.
Deseo aunque no me alegro por ello que la depresion sea por tener consciencia de esas cosas.
Besos.