Mal dia para buscar

6 de julio de 2014

Gowex gratis y la palabreria.

Una de las cosas que tienen las nuevas tecnologías es que bajo el epígrafe de GRATIS se esconde siempre un negocio y esto significa precisamente que gratis, lo que se dice gratis, no es. De algún sitio saldrá el dinero que paga las vacaciones del CEO, porque son CEO y no gerentes, Community Managers, Personal Trainers o cualesquiera que sean los nombres que pueblen sus molonas tarjeta de visita que te pasan por NFC o con un QR desde su teléfono, porque el bluetooth es antiguo y el cartoncillo de perdedores.

Ya sabíamos que Google se financia de la publicidad que consigue de vender nuestros datos y nuestras búsquedas y que Facebook hace más o menos lo mismo experimentando con nuestras cuentas para sacar conclusiones con el fin de hacer negocio. Lo curioso de todo esto es que cuando Internet apareció la inmensa mayoría de las personas juraban que jamás pondrían datos propios en webs de terceros, que es como jurar que jamás harán sexting.

Así que, subiéndose al carro de las empresas molonas y chulas, de las oficinas luminosas en Silicon Valley y de las presentaciones con público como si fueran los nuevos telepredicadores de la modernidad, miles de iluminados aparecieron para prometernos una rentabilidad mayor y un negocio próspero para ellos mismos y sus acaudalados inversores.

En el Paseo de la Castellana y con unos inicios en 1999, está la sede de Gowex. Es una empresa premiada y subvencionada porque hay que ayudar a los jóvenes emprendedores. Es un referente de rentabilidad y crecimiento, una maravilla de la gestión de la innovación. Su CEO, un tipo sonriente como un anuncio, se enorgullece de mostrar la bondades de una compañía a la cabeza en el mundo de la tecnología. Así que crece y crece y crece como si fuera una erección infinita. Sale a bolsa y promete que va a reconectar el mundo con wifi GRATIS para todos.

Ya apareció la palabra GRATIS.

En ese momento (unos millones de euros después) llegan unos tipos que trabajan bajo el Batnombre de Gotham City Research y se preguntan, desconozco pagado por quien, que de donde saca dinero alguien que da algo gratis. Parece que el negocio estaba en dar, en este mundo de 3g y 4g, wifi gratis en las ciudades a base de firmar acuerdos con los ayuntamientos o los transportes públicos financiándose de lo que pagan los consistorios y algunos usuarios que quisieran navegar más rápido que en un anuncio. Nada que no hubiera estado inventado y economicamente fracasado hace años (Fon, Openwireless). Alguien se percata que el sistema, en realidad, casi no funciona y que los ingresos publicados no coinciden con las cuentas presentadas.

Efectivamente. El CEO asegura que lleva más de cuatro años mintiendo como un bellaco. Pide perdón en twitter, que es como se arrepìenten los CEOs.

Y ahora algunos se llevan las manos a la cabeza hablando del dinero del ICO que se va a perder y yo sólo puedo ver un argumento de película con moraleja, de un lobo de la Castellana en vez de Wall Street, de Lag y Dinero en vez de Dolor y Dinero, que vendía un producto imposible de rentabilizar pero muy chulo y muy moderno. Es más cool invertir en Wifi o en Trócolas Termonucleares Transgénicas, y ademas ambas gratis para la sociedad (porque todo el mundo necesita una trócola), que hacerlo en cosas tan poco emocionantes como alguien que se gaste una cantidad de dinero, fabrique un producto o le de un valor añadido, y lo venda un poquito más caro quedándose la diferencia.

A veces se nos olvida que los negocios siempre son negocios y que, como decían por ahí, nada es gratis en la vida. Esta vez, una parte, la vamos a pagar todos.

Creo, sinceramente, que nos encanta sentirnos estafados por la palabrería de lo tecnológico y el dinero fácil, el 113% de crecimiento anual y el marketing de un anuncio de esos, al estilo Apple, donde nada es verdad pero es bonito creerlo.

Nadie se preguntó de donde salía el dinero para tantas cosas GRATIS. La respuesta era que de ningún sitio. Era un agujero descomunal. Los sellos se han convertido en punto de acceso.

Ahora vete tú a pulsar en el próximo link donde aparezca "free" y no esperes que te estafen.

Pd: En menor medida esto es como lo del pan a 20 céntimos o el cliente que me dice que su sobrino compra por internet lo que yo le vendo por 150€ por 40€. Lo peor es que se lo creen y quienes intentamos ser honestos nos preguntamos si acaso deberíamos de ser unos hijos de perra para poder sobrevivir. Aún nos queda ética. Desconozco hasta cuando, supongo que hasta la pobreza. Mientras tanto nos desinflamos con ese punto de nostalgia por la bondad que tiene la guitarra de David Gilmour (y eso es una excusa para poner el video).

2 comentarios:

Alberto Secades dijo...

Joder. El último párrafo me llegó al alma.

Y pensé que la ética y las ganas de echar a correr estaban ocultas bajo enormes capas de caspa.

http://www.comunsinsentido.com/2014/07/gowex-como-formula-anticaspa.html

Gracias

pesimistas existenciales dijo...

ya sabes que hay veces que, cuando hablas tu, sube el pan.