Tenemos el Coronavirus y parece que nos gustan las noticias de un mundo apocalíptico. Nos creemos esos bulos de gente muriéndose por la calle ( que si nos dicen que son rusos juraremos que están hasta arriba de vodka) y vivimos pensando que la destrucción zombie está mucho más cerca. ( Gran momento para recordar Zombieland, pero la primera)
Pero, si echamos la mirada muy poco más atrás, tuvimos el ébola en Alcorcón. Tuvimos a las vacas locas. La gripe A y aquello de la carne mechada que mataba a las señoras de 90 años y provocó algún aborto. No digo que no haya nadie que se haya muerto de comer carne mechada o que la gripe mate a unos cuantos cada año pero no nos hemos ido a la mierda después de vivir todo eso e incluso lo de la colza.
Vamos, que me pregunto si acaso necesitamos, cíclicamente, alguna que otra alerta sanitaria mundial.
De la misma forma que todas las tormentas son las más virulentas desde que hay registros y todas las sequías las más dramáticas. De la misma forma que los índices (de lo que sea) siempre son los mayores o menores jamás recordados y ponen a un señor mayor diciendo que nunca vio nada así.
Hoy en día todo es lo más o lo menos pero nadie dice que en invierno, pues llueve y hace frío.
Nadie dice que la gente, a veces, se muere de gripe.
"Va a ser la ruina", "Los ricos más ricos que nunca", "Los infectados caen en las calles", "La mayor alerta mundial desde que se tienen registros"
Todo empieza a ser una apocalipsis zombie que nunca llega, excepto a la prensa que cada vez se parece más a "El Caso".
En un libro de próxima publicación dice que lo que nos altera de la muerte es la personalización de la misma, que si las noticias cuentan que se han muerto cien indios y un dentista de Burgos, nos sentimos identificados con el dentista. ¿Sabes? Se han muerto 25 chinos. La prensa está llamando a todos los tipos de burgos que viven en Asia. Periodismo del bueno.
Vamos, que me pregunto si acaso necesitamos, cíclicamente, alguna que otra alerta sanitaria mundial.
De la misma forma que todas las tormentas son las más virulentas desde que hay registros y todas las sequías las más dramáticas. De la misma forma que los índices (de lo que sea) siempre son los mayores o menores jamás recordados y ponen a un señor mayor diciendo que nunca vio nada así.
Hoy en día todo es lo más o lo menos pero nadie dice que en invierno, pues llueve y hace frío.
Nadie dice que la gente, a veces, se muere de gripe.
"Va a ser la ruina", "Los ricos más ricos que nunca", "Los infectados caen en las calles", "La mayor alerta mundial desde que se tienen registros"
Todo empieza a ser una apocalipsis zombie que nunca llega, excepto a la prensa que cada vez se parece más a "El Caso".
En un libro de próxima publicación dice que lo que nos altera de la muerte es la personalización de la misma, que si las noticias cuentan que se han muerto cien indios y un dentista de Burgos, nos sentimos identificados con el dentista. ¿Sabes? Se han muerto 25 chinos. La prensa está llamando a todos los tipos de burgos que viven en Asia. Periodismo del bueno.
2 comentarios:
Si, pasa cada cierto
tiempo , me dá que creer
que hay locos por ahí
manipulando algo experimentando
con , vete a ver el que .
me equivoqué. Lo admito.
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