25 de septiembre de 2013

La violencia y los titulares adjetivados

Si Bretón era un malnacido asesino de sus hijos y un referente en ejemplificación de lo que se viene a llamar violencia machista ahora me pregunto, en el hipotético caso de que sea la madre la que ha matado a su hija en Coruña, si esto también es machista o podemos hablar exclusivamente de asesinato, que es lo que resulta ser en realidad. Una Bretona, que no una francesa.

Porque ellas también matan, qué puñetas.

No es cierto que sólo sean los inmigrantes los que roban ni los políticos los que defraudan. No es cierto que se le vaya la mano solamente a los hombres y que necesiten un hermano mayor solamente los adolescentes porque conozco a mucho cuarentón necesitado de un poco de disciplina. No son avaros los catalanes por su nacimiento de la misma forma que los euskaldunes no somos brutos e independentistas por algo que nos ponga en PNV en el agua. Conozco a mucha hija de perra que hace de su convivencia conyugal un infierno y a mucho dueño de mascota que se comporta como un perro.

Es hora, quizá, de eliminar más de un prejuicio de la prensa y de la manera que tenemos de hablar por la calle. Aplicar, de una vez, exactamente la misma argumentación "Bibiana Aídica" a nuestra forma de hablar y no considerar que tengamos un léxico que potencie determinadas actitudes, que es algo que defienden los expertillos en sus charlas. Defienden que si utilizamos expresiones como "trabajar como un negro" en realidad consideramos como normal un planteamiento racista y defienden que tenemos una sociedad que apoya el machismo como algo habitual (sexismo cotidiano, lo llaman) de la misma forma que, según cuentan, las mujeres árabes lapidan a sus compañeras porque se les levantó el burca con una corriente de aire y se les vió una enagüa.

De la misma forma que se tiene prácticamente estandarizado que aquella manera de hablar fomenta nuestras más ancestrales lacras es probable que la discriminación positiva del lenguaje periodístico nos haya llevado a un punto en que a alguno le resulta imposible creer que un dueño muerda a su perro, un currante sea un vago o una mujer mate, porque eso hace entrar en una paradoja imposible de entender para muchos.

Y la única razón es que no hay delitos que se cometan porque se esté genéticamente marcado, sino porque se es un hijo o una hija de puta, con mis respetos a las meretrices. Los delitos no tienen sexo ni nacionalidad, no tienen edad. Son delitos, y son delincuentes. Los asesinos de ETA no eran terroristas, eran asesinos.

Ahora vas y me hablas de violencia, de robos, de asesinatos y de fraudes. Pero no le pongas adjetivos.

Cuando un padre asesina a sus hijos es un asesino, no un asesino machista. Cuando una madre asesina a su hija no es una asesina feminista, es una asesina.


Pd: las fotos corresponden a un estreno en el que participa un amigo cuyas fotos me han resultado perfectas.

3 comentarios:

  1. Es que no se le dice asesino machista a un padre que mata a sus hijos, si no a un hombre que mata a una mujer a la que supuestamente antes había anulado y degradado como ser humano hasta convertirla en un objeto de su uso y disfrute. Probablemente cada caso sea diferente y esta definición no sea perfecta en casi ninguno de ellos, simplemente aún no hemos encontrado ninguna mejor. Antes de llamarlo así le decían "crimen pasional" o " violencia doméstica" que tampoco suena como muy apropiado. Y si, podríamos llamarlo violencia simplemente, pero entonces perderíamos parte de su significado.
    Igual pasa cuando dices terroristas en lugar de asesinos, no significa que no lo sean , simplemente estás específicando a que variante de asesino pertenecen. Otra cosa es que alguna vez, la definición no sea la acertada, pero también diciendo asesino a secas se puede meter la pata.
    Lo que igual si nos vendría bien cambiar, más que nada por aquello de hacer un poco de pedagogía del lenguaje es dejar de utilizar expresiones peyorativas o degradantes en función del grupo étnico ( racistas), género ( sexistas) y orientación sexual ( homófobas), especialmente aquellas profundamente arraigadas en el imaginário público. Expresiones como " trabajar como un negro" son racismo puro y duro. Que nos parezca normal decir algo así, certifica lo racistas ( como país) que somos.

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  2. A ver si nos enteramos, que ahora me dicen que hago "machismo pop". (Supongo que es porque el 90% de las personas leen el titular y las tres primeras frases, suspendiendo "comprensión del texto")
    Mantengo, lo cual me sigue pareciendo de logica aplastante que un asesino lo es independientemente de su sexo o de su "motivacion". Cuando, en Euskadi, hablaban que ser terrorista era ser una especie de asesino de otro nivel siempre me parecio una estupidez porque les daba un matiz diferente. Pensar que un ladrón a punta de navaja nacido en Carabanchel lo hace por necesidad y porque los bancos son malos y un nigeriano lo hace porque está genéticamente marcado es una sandez digna de un estúpido. Y es la misma estupidez (aqui es cuando alguno me cruje) de mantener, tal y como me dijo una responsable de un centro de atencion a la mujer, que las mujeres son buenas por naturaleza y que si lo hacen será por algo (ojo, ver video: http://youtu.be/GNCZfdQNqug ). Es como cuando, en época predemocrática, cuando le metian a alguien en la carcel las señoras de bien decían que "algo habrá hecho".
    La base del post es admitir que si eliminamos algunos adjetivos de los titulares es bastante probable que metamos a los asesinos, ladrones y delincuentes en el saco que se merecen y no les demos excusas para hacer juegos de buenos y malos.
    Pijoterío pop, quizá. ¿Machismo pop? Una mierda.

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  3. Estoy de acuerdo: un asesino es un asesino, se vista con una bandera, un diagnóstico psicológico o una placa oficial. Pero es útil calificarlos. Útil para saber si hay más pirados asesinos que quieren matar a inmigrantes o a mujeres o a quienquiera que pase por ahí. Sirve para vigilar las circunstancias que hacen posible, que facilitan o que aparentemente justifican ese crimen. Debería servir para poner defensas, para detectar vulnerabilidades. Si se mata a muchas mujeres por motivos privados, habrá que enfocarlo de un modo particular. Si se mata a inmigrantes, el enfoque tendrá que ser distinto, tendrá que afectar a algunos reglamentos y leyes, aunque en el fondo se esté combatiendo lo mismo. A veces me gusta tu cabreo, aunque no suscriba al cien por cien tus arranques. Como hoy.

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