Amor por lo paranormal

Existe un grupo gallego de profundas raices sumergidas a base de contactos en el mundo del pop y falta de éxito global llamado ectoplasma que tituló a su primer disco "amor por lo paranormal". Bien podría ser este el titular de cabecera de Iker Jimenez.

A mi personalmente me divierte leer el horóscopo de ayer para descubrir en qué se equivocó aunque tambien es cierto que casi nunca se equivoca. Si te dicen que "saldrás adelante con esfuerzo" sé que es verdad porque si no sales estás muerto y si estás muerto no me dirás que me equivoqué. Es como un juego en el que yo siempre gano. Por eso tengo poderes.

"Encontrarás el amor", "Te harán daño pero serás feliz un tiempo después"... Profecías y profetas los hay de todos los colores, con y sin velas negras.

Como siempre, escondidos en los recónditos lugares que nos negamos a pensar que la ciencia es capaz de descubrir, un grupo de personajes se gana la vida contándote lo que quieres oir. Porque ninguna pitonisa te dice que no vas a salir adelante. Nunca te miran a los ojos después de dar la vuelta sobre la mesa al as de bastos y te lo señalan diciendo que te va a dar con él o que te lo van a meter por algún orificio virgen. Nadie te dice nada malo. No resulta rentable dar malas noticias y cobrar por ello. Imagínate que te equivocas.

Hace más de 20 años, sentado en una terraza con un granizado de limón junto al estanque del retiro de Madrid, en uno de esos martes calurosos de verano y con mi hermana a modo de acompañante se nos acercó una gitana.

-Dejagme que os lea, guapoz, la mano para contarogh vuet´tro futuro

-No gracias.-respondí con secamiento brutal.

-Que zí, que zólo tengo que veróz pa vé parte de vueztro porvení

-¿Y qué es lo que ves, como anticipo?- dijo mi hermana

-Sé que vaiz a ser mú felices y que vaiz a tené unos hijos preziosos, porque zois una bonita pareja, mi arma.

Aunque descalificada la vidente, por error obvio con tarjeta roja directa, minutos después la ví imaginando un hermoso futuro a un dúo de turistas "castellanohablantes" que se fueron felices y contentos hacia la rosaleda de la parte norte.

El miércoles pasado estuve dos horas sentado junto a una pitonisa de esas que sale en televisión. Sobre sus apuntes estaban las anotaciones esas que se hace para cada símbolo zodiacal. En el medio estaba yo, según sus notas, recompensado en unas semanas con una historia de amor reencontrada no sin esfuerzo. Rápidamente pensé en cual podía ser esa historia y busqué con velocidad otro signo zodiacal. Leí sus notas. También va a ser feliz en el amor. "¿Podría ser -pregunté señalando- esto con esto?". "Claro que sí, corazón"-respondió con una sonrisa de esas que ponen las abuelas cuando te dicen lo guapo que estás. Me emocioné, lo reconozco.

Después me acordé de la gitana del retiro. "Me equivoqué, perdona- dije a modo de confesión- El signo de ella es éste"- y señalé otro. "Oh, sí, esto es mucho más claro, por supuesto. Enhorabuena".

Al final sólo nos reconfortan las buenas noticias y tampoco es tan malo ganarse la vida contando cosas buenas, sean o no mentira, de aire, agua o fuego. Ya lo dije, tenemos un tremendo amor por lo paranormal.

Pd: horóscopos por escrito: aqui. En video: aqui. (Seguro que miras por curiosidad)