hilos, títeres y tijeras

Hay muchos tipos de hilos.

El más interesante el es hilo del tanga, pero no van los tiros por ahí porque me pongo y porque no tengo ganas (ahora. Llamarme en media hora).

Hay hilos de los que cuelgan nuestras vidas, y que cuelgan de una forma pasmosa, y se cortan con la misma facilidad.

Hay quien piensa que lo que importa es quien mueve los hilos pero lo que realmente importa es quien te los corta. Te los corta un desaprensivo que tira una maceta por su ventana, un conductor que acelera frente a tu moto, un insulto a destiempo o simplemente una mala mirada. Todo esto son tijeras.

Y según van pasando los años veo tijeras roñosas cortando y despellejando (en su segunda acepción: Murmurar muy malamente de alguien. ). Desafortunadamente, al contrario de lo que me decía mi madre, intuyo que hay marionetas caídas que no se lo merecen.

Hoy tengo que comprar una bobina de justicia para arreglar lo que el ganado bovino rompe con tijeras prestadas.

Hay dias en los que me gustaría ser un superhéroe. Hoy, por ejemplo. Pero no lo soy.