En el año 2005, en la final de la liga ACB de baloncesto, el Tau Vitoria ganaba, en su casa, 69-61 a falta de 50segundos al Real Madrid y, sin embargo, perdió.
Tengo más de un amigo que dice que, en el deporte profesional, la capacidad mental es tan importante como la física. Tiene razón.
También empiezo a creer que muchas de las cosas que vivimos como sociedad no son muy diferentes a las que suceden en el mano a mano de las personas. Es decir, que las sociedades, los equipos deportivos, los partidos políticos e incluso las empresas, empresitas y empresonas interactúan entre sí de una manera que puede llegar a asemejarse a las formas que mantenemos entre nosotros.
Una empresa puede prometerte la luna sin hablar de dinero de la misma forma que te pueden decir lo estupendo que estás en un bar, a la cuarta copa, , cuando en realidad quieren exclusivamente tu sexo. Un partido político puede decirte que te amará siempre para zancadillearte después y algunas aficiones se enfadan de manera irracional cuando, en el fondo, se necesitan como puede suceder en una tira y afloja sentimental.
Las diferencias que existen, que las hay, no están muy alejadas de ejemplos que conocemos a diario. EEUU, que tiene muchos amigos en facebook que ponen "me gusta" a cada tontería que publica, borró a Iran de su lista de amigos de la misma manera que bloqueó a Cuba, aunque ahora le ha desbloqueado pero no ha aceptado su solicitud de amistad. Los nacionalistas catalanes, enfadados en su matrimonio con los nacionalistas españoles, han amenazado con irse de casa porque no reciben la paga que se supone que merecen, que es lo mismo que piensa mi sobrina, que es una pieza fundamentel en la vida familiar.
El futbol inglés, que se volvió loco y generaba problemas allá por donde estuviese, fue castigado hasta que lograse la calma necesaria de la misma forma que algunas parejas intentan parar las discusiones dañinas continuas con una separación temporal.
Hay deportistas que pasan años en un mismo equipo de la misma manera que algunos matrimonios son eternos y otros que cambian de equipo varias veces al año como si no pudieran encajar en un mismo lugar el tiempo suficiente para demostrar que valen la pena y yo conozco casos de algunos que desean poder saber donde dormirán la semana que viene.
Hay productos que marcan a una compañía como lazos invisibles eternos entre nosotros y nuestros amigos, si es que pensamos en los de verdad. Hay veces que no somos capaces de pensar en algo nuevo que nos proporcione alguien de la misma forma que por mucho que Bimbo haga otras cosas siempre será una marca de pan y colgate una marca de dentífrico y, sin embargo, no se parece mucho a la empresa que era hace 30 años de la misma forma que nosotros no somos los mismos que éramos entonces. Hay empresas que parecían eternas y desaparecieron como los conocidos de los que no recuerdas su nombre.
Creo que no hay grandes diferencias entre las cosas que nos pasan en la relación que tenemos con nuestro trabajo y con nuestras parejas, la relación entre los hinchas de un equipo y otro, entre una empresa y otra o incluso entre paises o entre todos esos grupos y asociaciones que componen nuestro universo.
No hay diferencia entre una relación homosexual y una heterosexual, porque son relaciones entre personas. Se enfadan, se reconcilian y se quieren igual. No hay diferencia entre una relación personal y una laboral, porque sigue siendo entre personas que conviven juntas por un supuesto objetivo común. No hay diferencia entre un estado de ánimo de un equipo perdedor y una depresión solitaria y personal, porque son estados de ánimo. Ni siquiera las empresas se diferencian de nosotros mismos. Se acercan y se separan, compiten, se apoyan... Internet es un niño poderoso, la ONU un abuelito que dice lo que deben hacer sus vástagos como países. La panadería debajo de tu casa es esa vecina que ves a diario y con la que hablas lo justo en el ascensor. Las cadenas de televisión son serias o sencillas, luminosas o grisáceas, pones un canal esperando sonreir como cuando quedas con un colega gracioso o esperas pensar delante de un documental como cuando cenas con un sesudo intelectual.
Todo se compone de personas y, como personas que tiene, lo impregnamos de miedos, intereses, sueños, enfados e incorrecciones.
Cuando lo piensas como si fueran parejas que conviven, amigos que se van y vienen, encuentras algunas respuestas.
Y similitudes curiosas.
Pd: Nokia lo tuvo todo ganado en telefonía y perdió. España fue la primera potencia mundial y perdió. Yo también tuve todo ganado a falta de 50 segundos y perdí. (Eso sí: el tau Vitoria ganó en 2008 y 2012 la liga que perdió en el 2005)
También empiezo a creer que muchas de las cosas que vivimos como sociedad no son muy diferentes a las que suceden en el mano a mano de las personas. Es decir, que las sociedades, los equipos deportivos, los partidos políticos e incluso las empresas, empresitas y empresonas interactúan entre sí de una manera que puede llegar a asemejarse a las formas que mantenemos entre nosotros.
Una empresa puede prometerte la luna sin hablar de dinero de la misma forma que te pueden decir lo estupendo que estás en un bar, a la cuarta copa, , cuando en realidad quieren exclusivamente tu sexo. Un partido político puede decirte que te amará siempre para zancadillearte después y algunas aficiones se enfadan de manera irracional cuando, en el fondo, se necesitan como puede suceder en una tira y afloja sentimental.
Las diferencias que existen, que las hay, no están muy alejadas de ejemplos que conocemos a diario. EEUU, que tiene muchos amigos en facebook que ponen "me gusta" a cada tontería que publica, borró a Iran de su lista de amigos de la misma manera que bloqueó a Cuba, aunque ahora le ha desbloqueado pero no ha aceptado su solicitud de amistad. Los nacionalistas catalanes, enfadados en su matrimonio con los nacionalistas españoles, han amenazado con irse de casa porque no reciben la paga que se supone que merecen, que es lo mismo que piensa mi sobrina, que es una pieza fundamentel en la vida familiar.
El futbol inglés, que se volvió loco y generaba problemas allá por donde estuviese, fue castigado hasta que lograse la calma necesaria de la misma forma que algunas parejas intentan parar las discusiones dañinas continuas con una separación temporal.
Hay deportistas que pasan años en un mismo equipo de la misma manera que algunos matrimonios son eternos y otros que cambian de equipo varias veces al año como si no pudieran encajar en un mismo lugar el tiempo suficiente para demostrar que valen la pena y yo conozco casos de algunos que desean poder saber donde dormirán la semana que viene.
Hay productos que marcan a una compañía como lazos invisibles eternos entre nosotros y nuestros amigos, si es que pensamos en los de verdad. Hay veces que no somos capaces de pensar en algo nuevo que nos proporcione alguien de la misma forma que por mucho que Bimbo haga otras cosas siempre será una marca de pan y colgate una marca de dentífrico y, sin embargo, no se parece mucho a la empresa que era hace 30 años de la misma forma que nosotros no somos los mismos que éramos entonces. Hay empresas que parecían eternas y desaparecieron como los conocidos de los que no recuerdas su nombre.
Creo que no hay grandes diferencias entre las cosas que nos pasan en la relación que tenemos con nuestro trabajo y con nuestras parejas, la relación entre los hinchas de un equipo y otro, entre una empresa y otra o incluso entre paises o entre todos esos grupos y asociaciones que componen nuestro universo.
No hay diferencia entre una relación homosexual y una heterosexual, porque son relaciones entre personas. Se enfadan, se reconcilian y se quieren igual. No hay diferencia entre una relación personal y una laboral, porque sigue siendo entre personas que conviven juntas por un supuesto objetivo común. No hay diferencia entre un estado de ánimo de un equipo perdedor y una depresión solitaria y personal, porque son estados de ánimo. Ni siquiera las empresas se diferencian de nosotros mismos. Se acercan y se separan, compiten, se apoyan... Internet es un niño poderoso, la ONU un abuelito que dice lo que deben hacer sus vástagos como países. La panadería debajo de tu casa es esa vecina que ves a diario y con la que hablas lo justo en el ascensor. Las cadenas de televisión son serias o sencillas, luminosas o grisáceas, pones un canal esperando sonreir como cuando quedas con un colega gracioso o esperas pensar delante de un documental como cuando cenas con un sesudo intelectual.
Todo se compone de personas y, como personas que tiene, lo impregnamos de miedos, intereses, sueños, enfados e incorrecciones.
Cuando lo piensas como si fueran parejas que conviven, amigos que se van y vienen, encuentras algunas respuestas.
Y similitudes curiosas.
Pd: Nokia lo tuvo todo ganado en telefonía y perdió. España fue la primera potencia mundial y perdió. Yo también tuve todo ganado a falta de 50 segundos y perdí. (Eso sí: el tau Vitoria ganó en 2008 y 2012 la liga que perdió en el 2005)
A veces buscamos la misma explicación para cuando perdemos, o cuando gana el otro (la diosa Fortuna no estaba con nosotros y sí con el otro).
ResponderEliminarY la misma explicación para cuando ganamos nosotros y pierde el otro (nuestra capacidad de esfuerzo fue superior al de enfrente).
Y no comprendemos que, parte de la explicación está en un modelo que exige que, para que gane uno (muchísimo), tenemos que perder los demás (mucho).
No sé, o algo parecido.