Navidad infantil en Las Rozas

Cuentan que el alcalde de Las Rozas, en una visita de unos estudiantes de 8 y 9 años les comentó que él no creía ni en Papá Noel ni en Los Reyes Magos. Los niños, al llegar a casa de sus padres les pidieron amargamente explicaciones porque pueden ser pequeños pero tontos no lo son.

Depués los concejales del PSOE han acusado al alcalde de hacer política para con la presión que hace el PP respecto de educación para la ciudadanía. Los políticos son el McGiver social: si el otro con un clip te hacía un tanque estos te cogen una declaración y hacen campaña. Como diría uno de ellos: "todavía hay algún tonto de los cojones que les cree"

En fín...

Creo personalmente que existen momentos en la vida que uno nunca olvida: el día que descubriste el engaño de la navidad, el primer beso, el primer tocamiento, la primera vez, la primera gran borrachera, la primera trastada infantil...

También existen últimos momentos que están ahí hasta que son sustituídos por otros: la última vez que saliste, la última novia, la última decepción, la ultima vez que... Pero estos, como la última camisa que te compraste, pasan a un segundo plano la próxima vez.

En algún sitio leí que los niños menores de 5 años tienen muy reducida su capacidad de mentir y que para ellos el mundo se compone exclusivamente de aquellas cosas que están dentro de su campo de visión y es por eso por lo que buscan a sus conocidos continuamente con la mirada. Eduard Punset, en su publicación navideña de este año comenta que un niño dependiente (lo que siempre hemos llamado un niño mimado) en sus primeros cinco años de vida es ,cuando se convierte en adulto, un adulto independiente (citando a Sue Gerhardt ) ya que esa sobreportección ayuda a desarrollar el cerebro en los niños durante los primeros 5 años de vida y eso le prepara mejor para la vida de verdad. Mantiene (y yo comparto) que la base para la mejora de la sociedad es educar desde el principio no con los métodos espartanos de toda la vida (al menos a los niños) sino dando pautas para el desarrollo cerebral personal de cada tierno infante. Si partimos del hipotético punto de partida inicial igualitario será nuestra capacidad de entrenamiento mental la que nos de alguna ventaja en la jodidamente dura carrera de vivir.

Y uno de los primeros momentos en los que descubrimos que nos estamos haciendo mayores y empezamos a correr solos es cuando el alcalde de Las Rozas nos abre los ojos. Y duele.